La factura de electricidad o gas de una comunidad de propietarios puede llegar a ser algo muy elevado, y hace que la mensualidad de la comunidad se eleve. Una manera de reducir este tipo de facturas en una comunidad de propietarios es el uso de energía renovable. En la actualidad, podemos instalar dos tipos de sistemas de energía renovable a nivel de vivienda: paneles solares y bombas de aerotermia.
Energía solar
Si bien al principio el autoconsumo compartido estuvo prohibido, desde hace un tiempo estos sistemas sí están permitidos e, incluso, son “obligatorios” en algunos casos. Las viviendas de obra nueva deben poseer paneles solares para el agua caliente de la comunidad o, en su defecto, otro sistema de energía renovable que cumpla dicha función.
A nivel de una comunidad de propietarios, la energía solar posee dos ventajas destacables: la reducción del gasto económico y la reducción de la contaminación.
Existen diferentes modalidades de energía fotovoltaica compartida:
- Aquellas que cubren solo gastos eléctricos de la comunidad: Se instalan en aquellas comunidades con poco espacio para los paneles o que no quieren realizar una gran inversión. Se cubren gastos básicos como la iluminación o el ascensor.
- Aquellas que cubren las necesidades de los vecinos: Aquí la instalación genera electricidad para los vecinos. Su participación es proporcional al consumo que vayan a realizar. No todos los vecinos deben participar.
Si bien es cierto que la energía solar se puede aprovechar en todo el país, lo cierto es que estas instalaciones son más rentables si la radiación puede incidir de manera perpendicular a los paneles. Sin embargo, el no poder instalar los paneles en nuestra azotea no quiere decir que no podamos beneficiarnos de este sistema. Existen tres posibilidades:
- Compartir el mismo edificio residencial, instalación de placas solares en la azotea compartida de nuestro edificio.
- Instalarla en el edificio contiguo, en un radio de 500 m; en donde la instalación se ubicaría en el edificio vecino.
- Instalarla en un edificio donde se compartan 14 dígitos de la referencia catastral.
Aerotermia
La aerotermia consiste en el aprovechamiento del calor presente en el aire para calentar agua. Este tipo de sistemas se puede utilizar a nivel individual o bien para el agua caliente de una comunidad de vecinos.
Si bien es cierto que estos sistemas requieren de electricidad para que funcione el motor de la bomba, lo cierto es que consumen un 70% menos que los sistemas tradicionales, por lo que se consideran sistemas de energía renovable.
Estos sistemas funcionan gracias a una bomba de calor que calienta un fluido en una unidad exterior y lo mueve hacia una unidad interior. Una vez el fluido caliente es utilizado, vuelve a la unidad exterior “frío”, lugar donde vuelve a calentarse.
Lo bueno de los sistemas de energía renovable para una comunidad es que los gastos de instalación se pueden dividir y todos los vecinos pueden beneficiarse. Sin embargo, no es obligatorio que todos los vecinos participen en la instalación.
